La Tragica Vida De Carlota

Marie Charlotte Amélie Agustine Victoire Clementine Leopoldine de Saxe-Coburg

“María Carlota Amalia”

Nació en el castillo de Laeken cerca de Bruselas, Bélgica el 7 de junio de 1849.Fue hija única en el matrimonio del Rey Leopoldo l de los Belgas y la Princesa Luisa María Francia.

Llamada así en honor a la primera esposa de su padre, la Princesa Carlota de Gales, que había muerto durante el parto, Carlota tenía tres hermanos: Luis Felipe que murió en la primera infancia, Leopoldo II, que después de la muerte de su padre se convirtió en Leopoldo II de Bélgica y el Príncipe Felipe Conde de Flandes.

Cuando Carlota tenía diez años, su madre murió de tuberculosis y Carlota fue dejada con la condesa Hulste que era una amiga cercana a su familia.

Cuando Napoleón III de Francia inicio la intervención francesa en México, el archiduque Fernando Maximiliano  de Habsburgo acepto la oferta de viajar para el nuevo mundo. Fueron coronados el 10 de abril de 1864 y vivieron en el Castillo de Chapultepec. La princesa Charlotte, archiduquesa de Austria, tomó el nombre español de Carlota Amalia De México al convertirse en emperatriz.

 La Emperatriz Viuda

El presidente de México Benito Juárez aprobó la ejecución de Maximiliano I en 1867 decidida por un Tribunal Militar. Las últimas palabras del depuesto Emperador sobre Carlota fueron: “¡Pobre Carlota!”. Uno meses antes se le había notificado que Carlota estaba enferma, el estado de Carlota fue siempre pobre. Su hermano el Príncipe Felipe, Conde de Flandes, la tenía con una atención medica que la declararon demente. Carlota paso el resto de su vida en aislamiento, Carlota falleció en el Château de Bouchout en meise, Bélgica. Mientras Carlota tenia esa enfermedad en progreso, su paranoia se fortalecía, ella permaneció profundamente enamorada de su marido. La enfermedad de Carlota fue tan fuerte que ella logro convencerse que Maximiliano aún estaba vivo y que pronto iba a volver.

Se dice que mientras Carlota dormía, ella tenía una pequeña muñeca que le llamaba “Max” hasta llego a decir que tenían una niña llamada Carlota Maximiliana. El resto de su vida (1867-1927) creyó que aún era emperatriz de los mexicanos. Jamás regresaría al país que adopto como suyo, México. Moriría 60 años después de su esposo, el 19 de Enero de 1927, víctima de una pulmonía.

También existió la teoría que la causa de la locura de Carlota fue debido a la ingesta de la seta Teyhuinti, se dice que Carlota fue con una herbolaria de la Ciudad de México a la cual le pidió ayuda para poder concebir. Llevaba oculta su identidad con un velo, pero la herbolaria, partidaria de Benito Juárez, la reconoció. Al teyhuinti se le conoce como “la carne de los dioses”, se emplea en las soluciones diluidas, como un tónico, porque a concentraciones altas puede producir un estado de locura permanente.